LA FUERZA SUPREMA
Nada ni nadie tiene dominio sobre el amor, el amor es la fuerza máxima que existe y quien llegue a vibrar en esa frecuencia será intocable por los de baja vibración.
En nuestra sociedad, cuando alguien te hace un daño, inmediatamente lo odias y odiándolo se establece unvínculo con la persona. Pero como el vínculo que hiciste fue de odio, adquieres lo peor de él, por lo tanto, le regresarás el daño, cobrando venganza, haciendo exactamente lo que él té haría, es decir, ahora eres como él.
Pero al contrario, si alguien te hace un daño y tú le respondes con amor, adquieres lo mejor de él. Si él llega a amarte también, como tú a él, vivirán en armonía. Pero si él llega a odiarte, mientras tú le amas, como adquiere lo peor de ti, no podrá hacerte daño, por el hecho de estar en otra vibración. Como alguna vez dijo Buda: “el odio no disminuye con el odio, el odio disminuye con el amor”.
Eres inmune a toda acción de maldad mientras permanezcas vibrando en amor. Si por alguna razón la acción que han hecho contra ti te hace odiar a tu agresor, es justo en ese momento del odio cuando eres vulnerable y te pueden hacer daño.
Si tu amor es verdadero y permanece siempre contigo, en tu corazón, no existirá el miedo, entonces, nunca atraerás situaciones de peligro, las repelerás de tu vida.
El miedo genera desconfianza hacia la vida y se atrae aquello que se teme; como comúnmente se afirma: “del mal que huyes, padeces”. Sin embargo, cuando amas, generas confianza con la vida misma y ella así te trata.
El miedo deja de existir cuando el amor es manifestado, de la misma manera que el ego se apaga cuando el ser se enciende.
Dios es amor. Si el amor está contigo, ¿quién está contra ti?
La fuerza suprema dominante es el amor, el amor es quien mantiene todo en orden, quien da vida, quien mueve al universo, y aquellos que experimentan amor en su más elevada vibración son los que hacen toda clase de proezas inimaginables.
Líderes de la magnitud de Jesucristo, Buda, Krishna y muchos otros han podido hacer lo que han hecho, únicamente porque han experimentado la faceta de amor supremo en su corazón, ese ha sido su estado de ser.
Experimentar el amor supremo es posible en todo momento y éste es el origen de la transformación. Cuando en tu vida experimentas una barrera o limitación, solo ámala. Amarla es aceptarla. Aceptarla es transformarla. Si te resistes a esa limitación, ésta permanecerá en ti.
Resistirse es ir en contra de la situación y ésta seguirá en contra de ti. La idea es aceptar la situación y a partir de ahí utilizar el amor para transformar.
El secreto de la trascendencia es hacer lo que amas o amar lo que haces. Cuando puedes hacerlo, tu presencia no pasa desapercibida.
Activa el amor en ti, en tu corazón a partir de ahora, enciende la llama del amor en tu corazón y mantén esa antorcha a donde quiera que vayas.
El universo es amor y estamos hechos a imagen y semejanza, por lo tanto, tú también eres amor.
Amor supremo en su esencia más pura es cuando los impulsos del universo están sincronizados con los de tu corazón. En ese momento el amor te mueve.
El amor es la energía que mueve al universo y mientras más amas, más poder posees, por eso el amor es la fuerza suprema.
Extracto del libro: Los Estados del Ser
@Elviajedelavida