Hemos visto necesario emplear el canal presente para sustraer de las conciencias despiertas las respuestas necesarias a los acontecimientos actuales, muchos de los cuales pasan desapercibidos por falta de atención y reflexión.
El plan de algunos ultra-poderosos del capitalismo de la Tierra es crear en el planeta el caos para sacar provecho de ello… “Los Reyes del Odio”, como les hemos llamado a los promotores de las desgracias, solo ven sus propios intereses sectarios y no se interesan en lo más mínimo por la vida humana, y mucho menos por la vida de los vegetales y animales, que para ellos son solo “cosas para el uso personal”. Por lo tanto, no les interesa la extinción de plantas y/o de animales, no se fijan en la vida, y no les importa que miles de especies desaparezcan cada año debido a sus desalmadas políticas económicas y comerciales “contaminantes” y “depredadoras”.
Los Reyes del Odio son capaces de destruir un bosque entero para encontrar una rara madera para construir un mueble para su castillo…, y no les importa dejar sin agua potable a un pueblo entero con tal de extraer un poco de algún preciado mineral de las entrañas de la Tierra. No les importan los mares y miran para otro lado cuando se derraman millones de litros de “oro negro” por la rotura del casco de un barco petrolero de su propiedad, y se lamentan por el petróleo derramado, pero no por los mares que han quedado contaminados y por las miles de criaturas marinas que perecen por esa causa… No les interesa dejar sin ‘pulmón verde’ (selvas y bosques) al planeta Tierra, obrando con actitud depredadora cuando ven en esa actividad un rédito comercial; y no les interesa que millones de personas mueran cada año por falta de alimento y/o medicinas, cuando los mayores recursos que podrían salvar vidas son empleados en armamentos y en fantásticos viajes al espacio financiados por ellos con recursos del Planeta y de los pueblos.
Es claro que este panorama, ante nuestra vista extraterrestre, es “de terror”. ¡Nos horroriza ver a la Humanidad terrestre desprotegida y mayormente ignorante y ciega ante lo que está ocurriendo! ¡Nos duelen los ojos y el corazón al ver el sufrimiento sin consuelo causado por tanto odio de los insensibles que gobiernan las más altas naciones del capitalismo!
Nos duele…, pero no podemos actuar, no ahora y no todavía, porque el mismo Espíritu Planetario Terrestre nos lo prohíbe. Él prefiere soportar en Su Cuerpo Global las heridas que recibe en sus reinos de vida, que son sus órganos vitales, porque sabe que en Sí Mismo un Plan mayor, de orden Divino, está aconteciendo. El Logos Terrestre es capaz de soportar a estos Virus del Odio porque sabe que, en su justo momento, la Cura llegará ‘como relámpago exorcizante’ y el Nuevo Día llegará…
El proceso global es, actualmente, similar al que ocurre en un ser humano que enferma, notándose esto en la constante elevación de la temperatura corporal. La elevación de la temperatura, la fiebre, es síntoma de enfermedad, de infección, pero es, a la vez, una natural reacción de defensa del cuerpo humano ante el agente que causa la enfermedad. La elevación de la temperatura es producida por las defensas del cuerpo que, al elevarse de grado en grado, espera destruir al germen virósico…
A nivel planetario ocurre algo similar. Los “virus-entidades” que están infectando al planeta producen reacciones de autodefensa en la Tierra, como la elevación de la temperatura global, para frenar las embestidas depredadoras y envenenantes de los entes virósicos del odio. Estos virus serán finalmente derrotados al llegar “el Médico” desde el Cielo a efectuar “la Gran Cirugía”, pero mientras tanto el Planeta eleva su temperatura (a nivel climático y vibracional) para intentar contener y, si es posible, eliminar parte de los “virus del odio”.
El Plan es permitir que el proceso de la enfermedad planetaria avance hasta cierto punto hasta que llegue, entonces sí, la cura total y definitiva.
En este proceso se encuentra la Tierra y el clímax de la enfermedad global estará evidenciado en la Gran 3° Guerra, que será de corta duración, pero devastadora.
Mediten los estudiantes.
Agentes Solares en Tierra