Mira que lo dije en varios posts que eso se asemejaba a una estafa piramidal...
Realmente su modus operandi fue parecido a lo que hicieron la familia Ruiz-Mateos con Nueva Rumasa.
Hagamos un poco de historia.
En el 2015, más de cinco mil personas decidieron apoyar desde el principio a Pedro J. Ramírez en su nueva andadura en solitario cuando lo echaron a patadas de la basura de El Mundo. La mayoría de estos inversores aportaron una pequeña cantidad para contribuir al lanzamiento de El Español.
Mediante una plataforma de 'crowdfunding' recaudó 3,5 millones de euros, cifra que representaba un 20% del capital total, de 17,1 millones de euros.
Pues bien, esos accionistas minoritarios están poniendo a la venta sus acciones de El Español. Contabilizando uno a uno, se trata de 406 accionistas, que totalizan 3.391 participaciones
Los accionistas, que compraron a 100 euros las acciones, las han puesto a la venta en su mayoría por debajo del valor nominal. Pese a obtener pérdidas en la operación, mantienen la voluntad de vender porque desean recuperar al menos parte del dinero invertido.
Hasta el punto que un inversor vendió su acción por 1 euro (un 99% por debajo de su precio).
En Facebook existe una página denominada “accionistas afectados por El Español” en la que denuncian no haber recibido el título de las participaciones que compraron antes del 28 de febrero de 2015.
Curiosamente en esa página leen artículos de este blog...
La compañía aseguró a estos inversores que las participaciones adquiridas se convertirían en acciones tan pronto como finalizase la campaña de captación de socios vigente hasta finales del segundo mes de 2015.
Algo que no ocurrió...
En el último ejercicio económico, la sociedad editora de El Español registró unas pérdidas de 2,7 millones de euros.
Viendo la "vida loca" de Pedro J, mucho me temo que ese digital tiene los días contados
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