Jeshua: Encuentra tu lugar
Canal: Pamela Kribbe | Fuente
Queridos amigos, queridos hermanos y hermanas. Yo soy Jeshua, un espíritu afín, un alma gemela.
Nuestra conexión está fuera del tiempo y del espacio. Es una conexión del alma que trasciende las leyes del tiempo y el espacio. Ahora estás vestido con cuerpos terrenales, pero yo estoy libre de eso. Me muevo en un campo diferente de conciencia y por lo tanto no estoy limitado a un punto material en el espacio y el tiempo. En cierto modo, estoy en todas partes a la vez, porque no estoy atado por la fisicalidad, por eso estoy muy cerca de vosotros en vuestros corazones, siendo el corazón un lugar más allá del espacio y del tiempo. El corazón puede estar conectado, como centro energético, a un órgano físico, pero también es una puerta de entrada a otra dimensión. En realidad, todo el cuerpo es una puerta de entrada a otra dimensión, pero te has acostumbrado a considerar el cuerpo como un instrumento material. Sin embargo, incluso hasta sus fibras más profundas, el cuerpo es la expresión de tu alma viviente,lo cual es mucho más vasto de lo que pueden contener las leyes de la materia. Siente en ti la presencia de tu alma.
Si te sintonizas conmigo como la energía del Ser de Cristo, puedes sentir esa grandeza y inmensidad dentro de ti mismo, y entonces sientes que no estás solo. Sin embargo, la sensación de estar solo, que a menudo experimentas, es una ilusión persistente alimentada por todo tipo de patrones de pensamiento en tu sociedad. Pero, esencialmente, esa soledad, ese aislamiento, esa separación, que a menudo experimentamos y que hace que la vida en la Tierra sea tan difícil, es una ilusión – también sentimos que. Entonces siente ese amplio campo de luz, así como la parte sin cuerpo de ti, la parte que no está limitada por el tiempo y el espacio. Siéntelo. Siéntelo en tu cuerpo, para empezar en tu corazón. Siente la inmensidad, el infinito en tu corazón. Realizas la danza en materia, pero en lo más profundo de ti eres un maestro de la materia. Eres libre.
¿Por qué te señalo esto? Es porque estás dando un salto de conciencia en tu vida. Pero es una vida que se mueve dentro de un salto de conciencia transformacional más amplio que está teniendo lugar en la Tierra. Esa conciencia global en la Tierra es un campo muy grande con muchas gradaciones. Hay grandes diferencias dentro de esa conciencia, desde lo muy antiguo a lo muy nuevo, desde lo conservador a lo innovador y progresista. Por eso es muy importante que conozcas tu lugar en este campo, porque ese lugar es donde funcionas de manera más óptima y con alegría.
También hay lugares muy importantes en este campo colectivo global de la conciencia humana, o conciencia de masas. Puedes sentirlo a tu alrededor. La Tierra tiene un aura, o más bien la humanidad en su conjunto ha creado un campo áurico que es como un manto sobre la Tierra. Hay mucho de lo antiguo allí; callejones sin salida que ahora se sienten cada vez más claramente. La humanidad, o su conciencia, se ha enredado tanto, por así decirlo, con lo viejo, que ahora han surgido muchos desafíos en la Tierra y dentro de la humanidad que están obligando a la conciencia humana a salir de este laberinto de viejas formas de pensar.
Piense en esta vieja conciencia de masas como un laberinto complejo, con todo tipo de caminos y callejones sin salida, en el que la humanidad intentó crear una variedad de estructuras para mantener viable esa conciencia. Sin embargo, esto ya no es posible. La conciencia humana ahora requiere una forma realmente diferente de ser, pensar y sentir. Sin embargo, esa forma diferente de ser y sentir no puede provenir del laberinto y sus estructuras existentes. Es necesario cambiar sustancialmente el pensamiento. Además, la forma en que te relacionas con la otra persona, contigo mismo y con el entorno debe hacerse de una manera diferente, con una conciencia esencialmente nueva. Y esa nueva conciencia es lo que estás aportando. Ésa es vuestra contribución más profunda, pero también vuestra pasión y deseo: transformar esa conciencia de masas, poco a poco.
¿Cómo lo haces y dónde lo haces? Lo haces en un lugar donde ya se ha creado una apertura a la nueva conciencia. Te pido que traslades tu conciencia a tu esencia, a lo que eres más allá del tiempo y el espacio y aparte de tu cuerpo y materia, y sin tener en cuenta la forma aceptada de pensar. Experimentar esa libertad pura como alma es muy importante que lo hagas regularmente, porque hacerlo te separa por un tiempo de la pesadez y la lógica aparente de la conciencia colectiva que se ha apoderado de ti. Dentro de esa conciencia hay miedos, requisitos y juicios que se han convertido en algo natural para ti, y te han empujado hacia abajo y te han impedido realmente abrazar, integrar y realizar lo nuevo – y eso es lo que viniste a buscar.
Por lo tanto, romper con lo “viejo” que ahora está en ti es un paso importante para ti como pionero.
Comienza limpiando tu corazón. Hazlo ahora imaginándote a ti mismo como un pájaro, literalmente, y siente cómo una energía fluye desde tu corazón a tus hombros y brazos para crear alas – alas muy etéreas y finas. Hacer eso te ayuda a recordar lo sutil, intuitivo y sensible que eres. Cuanto más te desarrollas como un beng humano en la Tierra, y cuanto más sigues diciendo adiós a las capas más gruesas de conciencia aquí, más sensible e intuitivo te vuelves y menos capaz eres de tolerar esas vibraciones gruesas.
También sentirás más tu vulnerabilidad y tu dolor –esas partes traumatizadas de ti mismo– y eso es importante. Pero también es importante que este proceso de volverse sensible y experimentar tu vulnerabilidad y auténtica humanidad vaya de la mano con un recuerdo de tu divinidad, porque ahí es donde reside tu verdadero poder creativo. Siente cómo esa sensibilidad y vulnerabilidad son en realidad parte de tu ser más profundo y del desarrollo de tu conciencia.
Siente la energía fluyendo desde tu corazón hacia esas alas que ahora te pertenecen y que simbolizan tu libertad. Imagínate usar esas alas y sentir el poder en ellas, su fuerza muscular y su poder energético. Imagina que esas alas se conectan a tu plexo solar, a tu abdomen y a tu coxis, y literalmente siente el poder de esta gran ave dentro de ti. Imagina usar tus alas para emprender el vuelo – descubres que te gusta volar. Estás ahí afuera, en el vasto esquí, y sientes el viento a lo largo del cuerpo de tu pájaro. Al mismo tiempo, sientes una conciencia profunda en ti y te das cuenta de que eres mucho más que un pájaro – Eres un ángel.
Ahora mira con ojos interiores la Tierra debajo de ti. Siente lo que el campo de energía alrededor de la Tierra te hace. ¿Qué sientes cuando lo miras desde la distancia y aún así te sientes conectado? ¿Sientes tristeza o alegría, resistencia o compromiso? ¿Cuál es tu papel? ¿Cuál es tu lugar en la Tierra? Cada uno tiene un lugar en la Tierra, y así lo pretendía el alma. Mira desde esa altura donde estás ahora para ver si hay un lugar energético en la Tierra que te invite, que te llame. Un lugar también puede ser un ser humano, o una actividad, o tal vez lo veas como tu lugar dentro de la naturaleza.
Desciende de nuevo, lentamente, y déjate guiar por las ráfagas y el flujo del viento hasta donde te lleve la gravedad. ¿Dónde aterrizas en la Tierra? ¿Es un lugar familiar o un lugar desconocido? Siente lo que hay a tu alrededor. Algo te da la bienvenida, porque allí eres muy deseado. Vienes a traer algo que es precioso, y los que están allí lo entienden y lo aprecian. La gente quiere ayudarte y apoyarte para hacer esto. Siente lo que tienes que dar y dalo. Imagina que das energéticamente a los demás lo que quieres que fluya hacia este mundo. Hacer eso te hace feliz, porque es en el lugar correcto y en el momento correcto. No dudes. Lo que tienes que dar llegará a ti, de la forma que sea mejor.
Siente que hay un lugar para ti en la Tierra. En algunos lugares, hay grietas y hendiduras dentro de la conciencia de masas que en gran medida todavía están guiadas por el miedo o por la necesidad de poder y control. Pero en otros lugares hay grietas y hendiduras que han surgido de un impulso y una necesidad de renovación, y ahí estáis vosotros como trabajadores de la luz. Estos nichos, grietas y hendiduras en la conciencia de masas son aberturas: un deseo de lo nuevo y una bienvenida a lo nuevo, y ahí es donde perteneces. No es necesario unirse ni formar parte de ningún movimiento de resistencia. Son precisamente esos lugares seguros y alegres donde puedes dejar fluir tu energía los que hacen el bien a ti y a los demás.
Aquí está mi mensaje de hoy: date cuenta de quién eres y siente tu libertad. Retirarse de la conciencia de masas que genera miedo y control. Siéntete libre. Y desde esa libertad busca tu lugar y mantenlo alegre. No tienes que soportar el sufrimiento del mundo – ese no es tu papel. Traes luz y tú son ligero. Y no estás solo. Hay un campo muy grande de energía luminosa en el que te sientes como en casa.
Te saludo y estoy profundamente conectado contigo. Muchas gracias.
©Pamela Kribbe
Traducción de Maria Baes y Frank Tehan

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