Google, Facebook, Twitter y Yahoo
facturan el negocio español en Irlanda
- Aunque la práctica no es ilegal, así eluden el pago de impuestos
Apple no es la única gran multinacional tecnológica norteamericana que recurre a Irlanda para rebajar su factura fiscal en Europa.
Aunque el funcionamiento no es igual en todos los casos, hay cuatro compañías que están facturando todo su negocio español a través de sociedades irlandesas.
Se trata de Google, Yahoo y las redes sociales Facebook y Twitter. Y eso, al margen de otras firmas, como Microsoft, que desvían también a Irlanda una parte muy significativa de sus ingresos generados en nuestro país. La empresa creada por Bill Gates, que recibe una comisión por servicio de la filial irlandesa, está ya bajo la lupa de Hacienda, que le reclama 30 millones por liquidar mal el impuesto de Sociedades.
De acuerdo con los expertos en fiscalidad consultados por elEconomista, el movimiento es muy sencillo. Estas empresa facturan en Irlanda las ventas realizadas aquí y luego hacen un traspaso a sus filiales en el mercado español como pago por la prestación de servicios para poder cubrir sus costes de operación.
Así, las filiales españolas son meros intermediarios que, en teoría, cobrarían las comisiones en función de su trabajo o servicios.
El problema para la Agencia Tributaria es que los ingresos declarados por estas compañías están muy ajustados a los gastos (alquiler de locales, pago de personal) por lo que generan ganancias muy pequeñas y, por extensión, pagan muy poco en concepto del impuesto sobre beneficios, que en nuestro país es del 25% frente al 12,5% de Irlanda.
"En principio, la práctica no es ilegal, pero permite eludir el pago del impuesto de Sociedades en nuestro país al generar márgenes tan estrechos", explicó en declaraciones a este diario Carlos Cruzado, presidente del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).
En este sentido, el inspector de Hacienda José María Peláez aseguró que si se demuestra que existe un pacto entre las filiales españolas y las irlandesas para cuadrar los resultados y ajustar los beneficios, España podría reclamar el pago de más impuestos. ?Si los contratos entre la partes son artificiales, algo que es muy difícil de probar, se podría reclamar el pago?, sentenció.
En este punto, cabe recordar que Hacienda registró hace poco la sede de Google en España para buscar pruebas que demostrasen si la empresa ajusta los ingresos o el canon que cobra de Irlanda a los gastos para manipular los beneficios y rebajar la tributación. Google Spain, filial del buscador de Internet, declaró el año pasado unos ingresos de 66,6 millones.
Es un 21,3 por ciento más que un año antes, pero eso no significa que haya ingresado ese dinero de la venta de publicidad en España, donde domina el mercado online.
En realidad todo se gestiona desde Irlanda y lo que hace Google es traspasar luego fondos a su participada española. De la cifra de negocios declarada por Google Spain, 63,7 millones, el 96% del total, proviene de la filial Google Ireland y los 2,9 millones de euros restantes de la matriz norteamericana.
Los gastos declarados por el gigante online superaron los 54 millones y el beneficio neto apenas fue de 5,3 millones después de pagar 2,2 millones por el impuesto de Sociedades, en línea con el ejercicio anterior.
Transferencias de dinero
En las cuentas anuales remitidas al Registro Mercantil, la filial española admite que "el objetivo de la sociedad es mantener las disponibilidades liquidas necesarias, por tanto cuando necesita tesorería recibe fondos de Google Ireland por el importe que requiera en cada momento".
Google Spain, que cuenta con un patrimonio neto de tan sólo 17,1 millones, declaró el año pasado unos beneficios antes de impuestos de 7,5 millones y pagó a Hacienda tan sólo 2,23 millones.
El caso español no es una excepción. Google factura desde Irlanda, donde tiene 5.000 empleados, todas las operaciones en la región Emea, que incluye Europa, Oriente Medio y África.
Después, las filiales en cada país cobran por la prestación de servicios, apoyo en ventas y marketing o por el desarrollo de ingeniería e I+D (no es el caso de España).
Lo que defiende Google y el resto de tecnológicas que operan así es que sus filiales son remuneradas del mismo modo que si se encargara ese trabajo de asesoramiento a un tercero, aplicando las reglas estándar en cuanto a los precios de transferencia.
Twitter y Facebook, en la línea
Un caso similar es el de Facebook, que tal y como adelantó ayer elEconomista, sólo ha pagado a Hacienda 260.000 euros entre 2009, cuando constituyó su filal, y 2014, el último año con cuentas disponibles.
La red social admite en su página web que "la compra de anuncios de Facebook se efectúa a través de nuestra sede europea en Dublín", la más grande fuera de Estados Unidos. Así, se explica a los anunciantes que "si tu dirección comercial se encuentra en la Unión Europea, pero fuera de Irlanda, y compras anuncios de Facebook con fines comerciales, no agregaremos el IVA".
Los 3,93 millones que facturó Facebook Spain en 2014 no corresponden de este modo a la venta de espacios publicitarios, sino a la prestación de servicios a la sociedad irlandesa.
En este punto, los gastos de operación y laborales reconocidos por la red social alcanzaron los 3,63 millones en nuestro país, dejando un resultado de explotación de 300.000 euros en 2014. Con esas ganancias, Facebook, que tiene 21 millones de usuarios en España y concentra una buena parte de la inversión publicitaria online, pagó a Hacienda 84.000 euros en concepto de impuesto de sociedades.
Twitter también ha seguido los pasos de Facebook y Google, que llevan más años en Europa. La red social del pajarito, que creó su filial en España hace tres años, utiliza su firma en Irlanda para facturar toda la publicidad que genera en nuestro país.
"Tu compra de anuncios se lleva a cabo a través de Twitter International Company (ubicada en Irlanda). Estarás sujeto a cargos de IVA al porcentaje estándar actual de Irlanda", reconoce la compañía en su web.
Así, y siguiendo el esquema de sus pares norteamericanas, la compañía irlandesa pagó 3 millones de euros a su filial española en concepto de prestación de servicios como intermediaria en el cierre de las ventas.
Estos fueron los únicos ingresos de la red social en 2015 en España, que ha reconocido una ganancia neta de 150.000 euros después de abonar a la Agencia Tributaria 81.000 euros por el impuesto sobre beneficios.
Yahoo! también usa Irlanda para pagar menos impuestos. En 2014, la compañía, que hace mucho que no declara beneficios en España, trasladó todas sus sedes europeas a Irlanda, incluyendo Madrid y Suiza, por lo que empezó a prestar todos sus servicios desde ahí.
Esta medida se tradujo en un desplome del 60 por ciento de los ingresos que Yahoo Iberia recibió en 2015 de la filial irlandesa Yahoo EMEA Limited y de la firma de Dublín Overture Search Services, sus únicas fuentes de financiación.
Los gastos de la compañía cayeron un 69 por ciento y volvió reconocer pérdidas, por lo que no pagó el impuesto sobre beneficios, como en 2014.
Las dos vías de Apple
El caso de Apple, que ahora está bajo la lupa de Europa por las ayudas de Estado recibidas de Irlanda, tiene una doble variante.
Por un lado, Apple Marketing Iberia, que se dedica al soporte de ventas y dar servicios de marketing, actúa como comisionista de Apple Distribution International, con sede en Irlanda, que es su única fuente de ingresos.
Esta firma es la que operaba en España antes de que se abrieran las tiendas y servía de intermediario para vender los productos desde el tigre celta a las tiendas españolas.
En 2015 declaró unos ingresos de 27 millones y pagó 3,2 millones de impuesto sobre beneficios.
Por su parte, Apple Retail Spain, que es la filial que gestiona las tiendas, cobra los ingresos en España pero se gasta el 76 por ciento de ellos en compra los productos a la sociedad irlandesa Apple Distribution International, lo que le deja un margen enano y apenas paga impuestos. ?
La practica es ajustar los precios de las mercaderías para que no quede beneficio por tributar?, denuncian los fiscalistas. Apple asegura que paga los iPhones ?a precios de mercado?.
El 'doble irlandés'
Los fiscalistas denuncian que las grandes tecnológicas de EEUU tampoco pagan todos los impuestos en Irlanda. Según explican, utilizan una estructura fiscal que les permite enviar los ingresos de sus firmas de la isla del trébol a paraísos fiscales.
La practica se conoce como el doble irlandés.
En concreto, los gigantes crean una firma en Dublín y otra en las islas Bermudas a la que le venden derechos de imagen o propiedad intelectual. Así, cuando la filial irlandesa ingresa el dinero de la publicidad automáticamente tiene que pagar a la compañía de Bermudas por usar la imagen, dejándola casi sin beneficios.
Estas practicas no están perseguidas por la UE, que ha dado un paso para que las multinacionales online tributen en función de lo que generan en cada país. La iniciativa se llama Erosión por Bases Imponibles (BEPS) y está en pañales.
EEUU no logra poner freno a la elusión fiscal en el país
La explícita defensa que la administración Obama abandera durante las últimas semanas a favor de las multinacionales estadounidenses bajo el microscopio de Bruselas no supone un acto de socorro gratuito a estas compañías.
Más bien es el resultado de la frustración que EEUU sufre desde hace años con respecto a los suculentos beneficios que sus mayores empresas guardan fuera de sus fronteras y que no son fiscalizadas por el Servicio de Interno de Ingresos (IRS, por sus siglas en inglés), el equivalente al Ministerio de Hacienda en España. Un hecho que afecta al contribuyente y al déficit, según los expertos.
Tanto los demócratas como los republicanos en la Cámara de Representantes y en el Senado no consiguen desde hace años ponerse de acuerdo para lograr que una reforma del enrevesado código tributario, que invita a estas compañías a mantener sus beneficios fuera de las fronteras donde se asienta su sede fiscal.
De hecho, el senador demócrata Carl M. Levin, que preside el Subcomité Permanente de Investigaciones de la Cámara Alta, determinó, tras el análisis sobre el uso de paraísos fiscales por parte de Apple en 2013, que Bruselas debía cubrir el vacío legal del lánguido sistema fiscal estadounidense. Obana y el Tesoro sólo han conseguido poner parches al sistema en los últimos meses.