Y entonces, hacen su diagnóstico.
Te miran y te detectan.
Desembarcan en tu pequeño mundo . Pero no te conquistan. Ni te saquean. Ni te engañan.
Ell@s sólo traen amor en frasquitos. Y hacen lo que tienen que hacer por ti. Por tu Alma. Por tu dolor.
Por las ganas que tenías de encontrarte algo distinto en la vida. Hay hombres y mujeres que saben. Aún sin saber. Aún sin sospechar.
Aún sin ser completamente concientes de la importancia que tienen. Saben con otra sabiduría. Sonríen con otras sonrisas.
Dicen con otras palabras. Hacen magia. Hay hombres y mujeres así.
De lejos o de cerca. L@s admiro.
Porque ell@s tienen arte en las manos. Ellos te abren por el medio. Y tu no desconfías ni un segundo.
Porque ell@s son amigos. Pero no son amig@s comunes. Son amig@s raros. Son amig@s de otros lados. Son compañer@s de estrella.
Llegan. Hacen. Dicen. Miran. Ven. No siempre vas a gustarles. No siempre te van a amar como quieres que te amen.
No siempre vas a amarlos como quieren que l@s ames. Es otra cosa. Van a llegar para cumplir con el destino.
Van a llegar para mejorarte la vida un rato. Para devolverte un favor de algún tiempo. Para firmar un pacto. Porque ell@s son otra cosa.
Más profunda. Más extraña. Más capaz de quedarse dentro tuyo. Porque estos hombres y mujeres vivirán en esos lugares donde tu no permites entrar a nadie.
Porque tu te quedarás adentro de ellos como o un / a chic@ que se queda mirando el mar en la playa de noche.
Hay hombres y mujeres que llegan para reparar a las mujeres y hombres que reparan. Porque nacieron para eso. Para curar a l@s que curan.
Para sanar a l@s que sanan. Porque somos compañeros. Amados. Amantes. Amorosos.
Y cuando dos compañeros así de bonitos se chocan, se juntan, se entrelazan, se aman a su manera, el universo festeja.
El universo agradece y tú también. ❤❤❤
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