hola democrácia

Son luces, que no sombras Es sanísimo, buenísimo, que haya multiplicidad de ideas recogidas en eso que aún existe y se llaman partidos políticos. Llegará también el tiempo de evolucionar ese concepto aglutinador de deseos ciudadanos conformadores de un mismo sistema. Es sanísimo que despierten voces diferentes, es motor de vida, de DEMOCRACIA pura, sin estar sometida a siglas sempiternas, a ideas de líderes indispensables, portadores de la única verdad posible. EL poder de la DEMOCRACIA radica en el consenso, en la visión real del entorno y las circunstancias que crean la realidad del tiempo qeu se vive. Riqueza positiva, superación de ideas ancladas en pasados de miedos, esperanza contra incertidumbre, ganas de crear antes que lamentar un pasado perdido, conseguir crear señas de identidad nacionales en lugar de llorar por imperios tristes y amorfos perdidos. Glorias de presente, de gente activa, inteligente, emocionalmente unida a la gente. Sería gravísimo, tristísimo, negar estos pasos de presente en favor de una maquinaria anquilosada en sus vicios, incluso en medios de comunicación. EL poder del avance no se puede atar en mesas de despachos. Una nueva brisa llega, que pudo ser viento demoledor y se hace brisa para respirar mejor y más limpio. No se puede temer a las ideas nacidas de guapos cerebros. Es precioso dialogar, escuchar, y quien vea mal en estas cosas, seguramente esté más alejado de la DEMOCRACIA que de aquellso a lso que tildan de terribles y antisistemas