Netanyahu podría ser investigado por soborno y fraude

Publicado: 28 dic 2016 09:30 GMT 

La Policía pide al procurador general de Israel que abra una investigación criminal completa contra el primer ministro israelí, tras salir a la luz nuevos documentos importantes relacionados con su caso.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, asiste a la reunión semanal del gabinete en su oficina de Jerusalén, el 25 de diciembre de 2016.Dan BaliltyReuters

La investigación secreta сontra Benjamin Netanyahu que se prolonga desde hace nueve meses ha dado un nuevo giro este lunes después de que la Policía recibiera nuevos documentos, según informa 'The Times of Israel'.

Basándose en esos documentos, la Policía ya ha solicitado al procurador general de Israel, Avichai Mandelblit, que les permita abrir una investigación criminal completa en los próximos días contra Netanyahu por soborno y fraude agravado.

Mientras, el portavoz del primer ministro sostiene que las acusaciones son "absurdas". "Desde la victoria de Netanyahu en las últimas elecciones e incluso antes, algunos elementos hostiles se esforzaron por intentar la caída de Netanyahu, presentando acusaciones falsas contra él y su familia. Pero no había nada y no habrá nada", declaró.

Netanyahu es acusado de recibir grandes cantidades de dinero del multimillonario francés Arnaud Mimran, condenado por fraude. En mayo también apareció un informe crítico sobre los viajes al extranjero efectuados por Netanyahu, algunas veces con su esposa e hijos, entre 2003 y 2005, cuando ocupaba la cartera de ministro de Finanzas. En junio, el jefe de la Policía israelí, Roni Alsheikh, dio su aprobación a la apertura de una investigación secreta de Netanyahu, pero pidió discreción y exigió que no se divulgaran detalles a los medios de comunicación.

Además, Netanyahu podría ser investigado por su papel en la compra de submarinos de una compañía alemana por parte del Ministerio de Defensa de Israel. El asunto generó controversia el mes pasado, cuando apareció una información que apuntaba a que el primer ministro pudo haber influido en estas negociaciones, ya que David Shimron, su abogado personal, mantuvo relaciones comerciales con ThyssenKrupp, empresa constructora de submarinos.

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