Viaja por el rumbo de la intuición

A veces me pregunto si estoy viviendo una interpretación de mi realidad como si realmente fuera cierta y dejo que las respuestas aparezcan en mi interior. 

Está claro que hay 
- claridad en toda oscuridad, 
- música en los silencios, 
- enorme energía en la imaginación 
y que puede el mundo disputar contra mí, 

pero yo debo intentar no disputar contra nadie al mismo tiempo que aprendo que el dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional, 

al igual que el aceite no puede mezclarse con el agua y que la aceituna, su fruto, es un gran tesoro.

Es un buen momento para ir soltando los viejos patrones adquiridos y viajar por un nuevo rumbo donde la intuición sea nuestro timón al mismo tiempo que remoldamos nuestros viejos sueños dándoles un sentido ilimitado al ser nuevamente alimentados, fortalecidos por nuestro interior en avance y en sintonía con lo que nos rodea por medio de la disciplina del corazón que nos ayudara a superar las pruebas aceptándonos tal y como somos con nuestros defectos 

y como no, también con nuestras virtudes, las cuales nos ayudaran a madurar como seres humanos.

Pero… ¿cuál es la parte real de esta situación?

Sé que de una u otra manera tengo todas las respuestas que necesito, 

tan solo debo ser receptiva y poniendo una gran confianza, escuchar.

Cada día que vivo es una ocasión especial...  

 y hay muchas razones, muchos motivos para vivir, 

y muchas acciones que hacer dentro de nuestra sociedad o nuestra familia, ese pequeño grupo tan especial para crear tanto el amor como la disciplina y la autonomía personal al mismo tiempo que podemos aprender a utilizar nuestra fuerza vital para el servicio de los demás.

Sé que con una pequeñita sonrisa, puedo ver mejor la vida, y aliviar a algunas personas la suya, por dura que ésta se nos ponga a veces, 
 
y en otras ocasiones con hacerme como una muerta, es decir que no me afecten ni los insultos ni los halagos (es como alguien que desea entregarme algo y yo no lo voy a recoger, así, esta persona portadora se queda con ello) por lo tanto, si alguien me insulta, con ser indiferente al insulto ya no lo recojo, por lo tanto, ella/el se quedaran con el regalo.

Y también siendo indiferente ante una perdida-derrota y una victoria-ganancia.

Escucharé a mi cuerpo y a sus señales, cómo vibra, cómo siente, cómo sueña…

Aprenderé a transmutar en positivo lo negativo, aunque para ello me lleve tiempo y esfuerzo, tengo toda una eternidad.

Existo en mi propio momento de evolución, 

con los ojos interiores podré ver lo que otr|@s no llegan ni tan siquiera a percibir,

 y debo aceptar a tod@s como son, 

de la misma manera que yo soy como soy, 

y lo seguiré siendo sin ser importante la percepción que sobre ello tenga yo misma o la/s persona/s que me juzguen, 

porque cada esencia, cada espíritu tiene su propio lenguaje.

Si regocijo mi corazón con mi/s pensamiento/s ya habré logrado lo que much@s desearían, ser mi propia dueña, porque cuando no me queda mas elección que las lágrimas, y las risas se hayan vetado en ese momento, incluso esas lágrimas las elegiré hermosas.

Y cuando no vea con mis ojos miraré con mi corazón.

Corrige al insolente y al malvado y solo lograrás que te insulte y te ofenda.  
Reprende al insolente y te ganarás su odio; corrige al sabio y te ganarás su aprecio. (Proverbios 9:7-8)

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