Esta primera mitad del año ha sido, en lo que a tecnología se refiere, el del dilema entre dejar WhatsApp para irnos a Telegram o Signal, o no, por culpa de ese anuncio de entrada en vigor de las nuevas condiciones de privacidad impuestas por Facebook. Así que la noticia que ha surgido en las últimas hora, no ayuda a confiar demasiado en lo que nos pueda deparar un futuro junto a la app de mensajería más popular del planeta.
El caso es que tal y como informa EuroEFE, las instituciones de la Unión Europea (UE) han decidido abandonar WhatsApp para marcharse a una de las plataformas que más han crecido al calor de su apuesta decidida por la privacidad de los usuarios: Signal. Según las mismas fuentes, ha sido el propio Consejo de la Unión Europea el que ha pedido a todos sus empleados que comiencen ya la migración de una plataforma a otra.
Cuestiones de seguridad, no privacidad
Si recordáis, el pasado 15 de mayo entraban en vigor los nuevos términos del servicio de WhatsApp, que debíamos aceptar para seguir utilizando sin problemas todas sus funciones. Unos pocos días antes, desde Alemania llegaba una petición a las autoridades alemanas y comunitarias para detener ese procedimiento y demorarlo tres meses para analizar en profundidad si los de Facebook están contraviniendo alguna directiva europea.
Tanto que, la decisión tomada por las autoridades europeas, que alegan motivos de seguridad, no sea el detonante que esperaban muchos usuarios para dar el paso de abandonar WhatsApp para entregarse a otra alternativa... ¿más privada? En su comunicado a los medios, la UE ha declarado que "el Consejo de la UE cambiará la plataforma de mensajería instantánea que usa para compartir información con los periodistas: trasladaremos los grupos (de chat) de WhatsApp a Signal”.
Ha sido el portavoz del Parlamento Europeo, Jaume Duch, el que ha confirmado este cambio, reconociendo que ahora mismo “utilizamos sobre todo Whatsapp” pero “estamos pensando en pasar a Signal porque parece más seguro, pero siempre será una cuestión optativa”. De todas formas, y como indican las fuentes, por suerte, las cuestiones capitales de gobierno del espacio europeo no se llevan a cabo a través de los chats, por lo que podemos respirar tranquilos.
Sea como fuere, es lógico que ante una decisión así, los ciudadanos nos preguntemos en qué papel quedamos: ¿debemos seguir los pasos de quienes nos gobiernan o todavía debemos confiar en que nuestras conversaciones se mantienen seguras con WhatsApp? Desde luego, por noticias como esta, no nos da la sensación de que sea así
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