Diez ruegos de un perro a los seres humanos

JUEVES, 2 DE ENERO DE 2014




hay cosas importantes en la vida, pero el amor y la amistad son las que se llevan el primer puesto

el amor y la amistad no entienden ni de edades ni de razas





y cuando hablo de razas me refiero a que traspasa tranquilamente desde los minerales hasta el ser humano, pasando por las plantas y los animales

yo siempre he estado rodeada de minerales, plantas y animales

pero son estos últimos quienes mas me han llenado con su amor desinteresado y su amistad verdadera



en el año 2000 llego a mis manos un pequeño extracto de la carta titulada “No abandones a tu perro” escrita en el año 92 por Cristina Antuñez Llimona

Desde entonces la guardo como un pequeño tesoro porque demuestra una sensibilidad de la que ciertas personas carecen

Y hoy, desde aquí y para ayudar a reformar esos argumentos, pongo mi pequeño grano de arena compartiendo este escrito que espero te llene de sensibilidad y buenos sentimientos



mi vida dura unos 10 o 15 años.

Cada separación de ti es para mí un sufrimiento.

Piénsalo bien antes de adquirirme

dame tiempo para comprender lo que quieres de mi

infúndeme confianza, vivo de ella

no te enojes demasiado conmigo y no me encierres como castigo.

Tú tienes tu trabajo, tus diversiones, tus amistades…

¡Yo solo te tengo a ti!

habla conmigo de vez en cuando

aprende a tratarme como es debido.

Yo nunca lo olvido

antes de pegarme, piensa que mis mandíbulas podrían destrozar fácilmente los huesecillos de tu mano, y sin embargo, no hago uso de ellas

antes de que me taches de “inútil”, “testarudo”, o “perezoso” cuando pides que haga algo, piensa que ha podido hacerme daño la comida o que he estado demasiado rato al solo que mi corazón está cansado

ocúpate de mi cuando llegue a viejo, también tul oseras algún día

quiero que estés a mi lado cuando llegue a ese difícil trance.

No digas nunca “no puedo resistirlo” o “que suceda cuando yo no me halle presente”

todo resultara mas fácil si estas conmigo