despidos en el Banco Santander

Dinero El Santander afronta un ERE cuando lleva prescindiendo de 1.000 empleados por año



En los últimos tres ejercicios, ha ido recortando un 12% la plantilla y cerrando un 15% de las sucursales
El Banco Santander ha abierto la espita de un proceso de ajuste de personal, que apunta a extenderse también al resto de las entidades financieras. Pero el banco que preside Ana Botín ha venido ya adelgazando su estructura en los últimos tres años.

El Santander ha decidido emprender ahora un  ajuste de personal a través de un expediente de regulación de empleo (ERE) que mantuvo en sigilo hasta la semana pasada.
Dio el visto bueno a una reestructuración de personal que puede afectar a  1.660 empleados (1.200 de los cuales trabajan en las 450 sucursales que la entidad pretende cerrar y 460 en la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte, Madrid).
 Una media de 1.000 salidas al año
Pero el ajuste en el Santander ya se viene aplicando, al menos en los tres últimos ejercicios, tras las integraciones de Banesto y Banif.
En 2013, Banco Santander  fusionó por absorción a Banesto. Aquel ejercicio acabó con 4.067 oficinas, un 12% menos que las 4.611 que tenía al inicio de 2013 –sumando Santander y Banesto-. La plantilla acabó con 27.406  empleados en España, después de reducir 2.300 tras la fusión con Banesto.
Al cierre de 2015, el último disponible, el Santander tenía  24.216 empleados en España (624 menos que en 2014) y 3.467 oficinas, según los datos que refleja el informe financiero de la entidad.
Esto supone, que desde la fusión con Banesto ha cerrado un 15% de las oficinas – unas 600- y ha recortado un 12% de la plantilla –unos 3.200 empleados- en tres años.


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