A quiénes pertenecen los 500 mil lingotes de oro que se guardan celosamente en una bóveda en Nueva York
En este búnker subterráneo se acumulan cientos de miles de millones de dólares en oro.
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Cientos de miles de lingotes de oro conforman una impresionante colección en una bóveda subterránea en Manhattan, en la ciudad de Nueva York. Se trata de la mayor reserva de oro del mundo, y está protegida por varios mecanismos de seguridad debido a la fortuna que representa.
Cada uno de estos lingotes tiene un valor de aproximadamente 500 mil dólares por su calidad. En total, toda la reserva de este metal precioso sumaría cerca de 250 mil millones de dólares, siendo uno de los repertorios más valiosos del mundo.
Cómo es el búnker donde se guarda la mayor reserva de lingotes de oro del mundo
La bóveda en la que se guardan los lingotes se ubica en el edificio de la Reserva Federal de Nueva York, que custodia alrededor del 25 % de todo el planeta.
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¿Quiénes son los dueños de todo el oro?
Según las reglas de la Reserva Federal, ninguna empresa privada o persona independiente puede guardar su oro en la famosa bóveda. Este servicio tan solo está disponible para bancos centrales, gobiernos y organismos internacionales.
Los datos del 2024 registran que hay 507.000 lingotes de oro guardados en la bóveda, y se dividen en toneladas por países.
- Estados Unidos: 8.134 toneladas.
- Alemania: 3.364 toneladas.
- Italia: 2.452 toneladas.
- Francia: 2.436 toneladas.
- Rusia: 2.299 toneladas.
- China: 1.948 toneladas.
- Suiza: 1.040 toneladas.
- Japón: 765 toneladas.
- India: 642 toneladas.
- Países Bajos: 612 toneladas.
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Cómo se protege el oro en la Reserva Federal de Nueva York
La bóveda en la que se guardan los lingotes de oro fue construida entre 1920 y 1924, y aún mantiene su estructura diseñada para proteger su interior.
Consiste en un búnker de hormigón de 140 toneladas y tres metros de grosor, con una entrada cilíndrica de acero de 90 toneladas y que se alinea con un marco de acero para formar un cierre hermético.
El acceso a la bóveda está fuertemente restringido, y se necesitan tres personas de seguridad que conocen diferentes combinaciones de seguridad para entrar. Ellos deben estar presentes en cada ingreso a la bóveda, ya sea que se quiera cambiar una bombilla o mover un lingote de oro.
Dentro de la bóveda hay 122 compartimientos numerados, asegurados con cerraduras de combinación y sellos de auditoría.
Alrededor de todo el búnker hay numerosas cámaras de seguridad y monitoreo que envían alarmas cuando detectan un movimiento no autorizado.
De acuerdo a la Reserva Federal de Nueva York, el banco no cobra una tarifa por el almacenamiento del oro, sino solamente por los movimientos entre compartimientos, ingreso o retiro de lingotes. (I)