Desde Bruselas y Ginebra lucharán las legítimas instituciones republicanas catalanas contra la perversidad de Francoland.
A más de uno le han chillado las venas cuando han comprobado que Anna Gabriel habla perfectamente francés. Se entiende que desde la analfabeta meseta se intente reventar un sistema público educativo catalán en el que los hijos de los obreros hablen 3 o 4 idiomas y den clases en las universidades.
Anna Gabriel se buscará la vida en Ginebra porque en España no hay independencia judicial. O sea, lo más básico ya no existe.
Los periódicos unionistas dicen que la cupaire "huye de la justicia". -Mentira-, huye de Francoland. De la misma manera que, acabada la guerra civil, la gente huía al exilio de la "justicia" de Franco...
Dos exiliados políticos de las características de Puigdemont y Anna Gabriel son dos granos en el culo de España.
Son dos catalanes que, por una parte, batallarán por el reconocimiento de la República de Catalunya y, por otra, mostrarán al mundo en qué se ha convertido España. La España de Rajoy, si quieren.
Desde aquí entiendo que cada partido y que cada persona utilice la estrategia que mejor le vaya para impedir ser encarcelados.
Y no es una fiesta estar exiliado. De un día para otro se pierde la relación continua con amigos y familiares.
Por eso, además de congratularnos debe entristecernos la suerte que compartirán nuestros compatriotas Puigdemont y Anna.
Es salir de las garras de España y ponerse guapa... |
Como dije hace unos días, la República está más cerca de lo que los catalanes sospechamos. Hay un ambiente de euforia y de ganas.
Sí, ganas de salir a la calle sin el lirio en las manos.
El gobierno de Rajoy y sus tribunales presuntamente corrompidos están a un error de liarla gorda.
Visca la llibertat!
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