Expuesto: El dominio secreto de los Rothschild, Rockefeller y Morgan 馃挜
Prep谩rese para descubrir la sorprendente realidad detr谩s de las familias m谩s influyentes del mundo y su inmenso control sobre la econom铆a global. El Cartel de la Reserva Federal, formado por los Rothschild, los Rockefeller y los Morgan, ejerce un poder sin precedentes que se extiende mucho m谩s all谩 del 谩mbito del petr贸leo.
Imag铆nese esto: los cuatro jinetes de la banca, incluidos Bank of America, JP Morgan Chase, Citigroup y Wells Fargo, se unen con los cuatro jinetes del petr贸leo, como Exxon Mobil, Royal Dutch/Shell, BP y Chevron Texaco. Sin embargo, su dominio no termina ah铆. A trav茅s de una intrincada red de bancos privados, han ampliado su influencia para abarcar la industria de la m煤sica. Estas colosales entidades, junto con Deutsche Bank, BNP, Barclays y otros gigantes europeos del viejo dinero, sostienen las riendas de la industria musical, lo que les permite dar forma a su trayectoria y ejercer su influencia.
Las maquinaciones maquiav茅licas de la dinast铆a Rockefeller llegan a todas partes, comenzando con la comercializaci贸n de la m煤sica a principios del siglo XX. Orquestaron un complot siniestro para cambiar la afinaci贸n est谩ndar de la m煤sica en el mundo a 440 tonos. Se sab铆a que esta insidiosa frecuencia provocaba una mayor agresi贸n, agitaci贸n psicosocial, angustia emocional e incluso dolencias f铆sicas. A puertas cerradas, esta manipulaci贸n result贸 en ganancias financieras para los c贸mplices del monopolio, incluidos agentes, agencias y empresas asociadas con el cartel criminal norteamericano Rockefeller y organizaciones influyentes.
Un avance r谩pido hasta finales de la d茅cada de 1980, cuando los Rockefeller convocaron a los principales ejecutivos musicales y artistas a una reuni贸n altamente clandestina en Los 脕ngeles. ¿Su siniestra agenda? Marcar el comienzo de la era de la m煤sica rap controlada, estrechamente vinculada a la privatizaci贸n de las prisiones estadounidenses. Estas prisiones de propiedad privada, operadas por los Rockefeller, los Rothschild, la familia Bush y otras figuras influyentes, sirvieron como operaciones de lavado de dinero, esquemas de exenci贸n de impuestos y empresas de esquemas piramidales.
Al elaborar un plan enga帽oso, los Rockefeller pretend铆an controlar la industria del rap y apuntar a las comunidades negras mediante la promoci贸n de m煤sica violenta que alimentaba la opresi贸n y el malestar civil. Reunieron a destacados ejecutivos y destacados artistas negros, y los vincularon con estrictos acuerdos de confidencialidad. Su objetivo era claro: orquestar la violencia dentro del movimiento de la m煤sica rap mientras los principales sellos discogr谩ficos aseguraban derechos exclusivos de producci贸n y distribuci贸n en todo Estados Unidos. A cambio, recibir铆an acciones y puntos dentro de los sistemas penitenciarios privados.
El plan mas贸nico se desarroll贸 con precisi贸n, lo que dio como resultado que m谩s de 1.500 sistemas penitenciarios privados encarcelaran a m谩s de 1 mill贸n de adolescentes negros en 1990. Estos j贸venes vulnerables, expresando el trauma generacional que se les impuso, contribuyeron sin saberlo al mal茅volo plan de los Rockefeller. Los sistemas penitenciarios privados obtuvieron miles de millones anualmente del gobierno, estableciendo una extensa red de lavado de dinero a trav茅s de productos inflados, como fideos ramen con un precio 8 veces su valor real. El flujo de cientos de miles de millones provenientes de fondos gubernamentales, esquemas piramidales y compa帽铆as de seguros transform贸 la privatizaci贸n de las prisiones en una empresa multimillonaria.
Los tribunales y jueces locales sentenciaron sin piedad a delincuentes menores y a delincuentes primerizos, llenando las prisiones privadas en expansi贸n. En consecuencia, Estados Unidos ostenta el lamentable r茅cord del mayor n煤mero de personas encarceladas en el mundo, con un n煤mero de prisiones sin precedentes. Esto no fue una coincidencia: fue un plan meticulosamente orquestado por los Rockefeller.

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