Gervasio Portilla
22 de enero de 2024
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La llamada Agenda 20-30, no llegará a implementarse, no sólo por el cambio que se producirá en la composición del Parlamento Europeo en las próximas elecciones del mes de Junio, sino que gobiernos como el de Suecia, han decidido ya abandonar muchos de los planes de esta Agenda.
El gobierno de la derecha de Suecia, ha eliminado los impuestos climáticos, impuestos por los socialdemócratas; así cuando estos gobernaban el precio del litro de diésel estaba a 28 coronas suecas, después de la eliminación por parte del gobierno de la derecha del impuesto climático, el precio ha llegada bajar hasta las 17 coronas el litro, un 39 por ciento aproximadamente menos.
El portavoz de Medioambiente de el partido en el Gobierno, Martin KInnunen, ha declarado que : ”En general, no vemos ningún valor añadido en el trabajo de la Agenda 20-30”.
En el último mes el Gobierno sueco, ha eliminado los objetivos de la Agenda 20-30 de las directrices de organizaciones del Gobierno como la Agencia de Productos Químicos, la Agencia de Energía, Agencia de Alimentos y Agencia de Gestión de la Marina y del Agua.
Sin duda, se ha iniciado un carrusel imparable en la defensa del sentido común y el bienestar de las personas en base al realismo y no al interés de unos pocos.
Las próximas elecciones europeas, tienen la palabra, y ya se baraja que el Partido Popular Europeo, tiene en cartera ampliar o suspender el plazo para la supresión de los vehículos que funcionan con combustibles fósiles; sin duda, sería un buena noticia a la que debieran seguir muchas otras.
La Agenda 20-30, es una “maquina” de pobreza y de desigualdad, basada en el interés de unos poco pero muy poderosos , por controlar la economía y sobre todo la libertad.
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