La Agencia Tributaria ha entregado en la Audiencia Nacional un informe sobre las supuestas irregularidades en la compra de tres viviendas realizadas en los últimos años por Alfonso Granados, hermano del político. Los expertos fiscales destacan la rapidez con la que se amortizó uno de los préstamos hipotecarios, las elevadas discrepancias entre tasación y precio escriturado, y el origen desconocido de parte de los fondos. Anticorrupción ya ha pedido ocho diligencias para investigar las cuentas del familiar del ex secretario general del PP madrileño.
Seis días después de que Francisco Granados enviara en mayo un escrito a la Audiencia Nacional proponiendo hacer frente a la fianza de 400.000 euros que le había impuesto el juez Eloy Velasco con varios inmuebles y fincas de familiares, la Fiscalía Anticorrupción solicitaba a los expertos de la Agencia Tributaria un informe sobre el origen del dinero con el que se había adquirido una de las viviendas que el político ofrecía como aval para su excarcelación. Hacienda remitió 48 horas después un informe, al que ha tenido acceso EL PAÍS, en el que se apuntan a la existencia de diversas irregularidades en su adquisición por parte de Alfonso Granados Lerena, hermano del político.
Poco después, el juez rechazó dicha propiedad como garantía de la fianza y Anticorrupción solicitó la practica de ocho diligencias sobre la misma al considerar que aquellas compras del familiar del ex secretario general del PP de Madrid fueron en realidad operaciones “instrumentales” financiadas por este último.
El origen de las sospechas se remonta a mayo de 2016. Entonces, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil remitió a la Audiencia Nacional un informe sobre un documento manuscrito atribuido a Francisco Granados intervenido en el despacho del constructor David Marjaliza en el que se apuntaba que la supuesta compra en 2011 de una vivienda en la calle Conde de Aranda de Madrid por parte de Alfonso Granados fue realizada con, al menos, 360.000 euros de dinero negro en metálico. Según aquel informe, el hermano del político ejerció en esa operación presuntamente de testaferro.
El nuevo informe de la Agencia Tributaria apunta en el mismo sentido y destaca las sospechosas cifras y movimientos de fondos que reflejan, no sólo la adquisición de aquel piso, sino también otra compra anterior y una posterior realizadas por el familiar de Granados de manera sucesiva.
Los expertos de Hacienda destacan que en la compra por 550.000 euros del último inmueble adquirido por el hermano de Granados —situado en la calle San Francisco, de Madrid, y que se iba a utilizar como parte de la fianza del exdirigente regional del PP— se abonaron 110.000 euros con fondos de una cuenta bancaria a nombre de Alfonso Granados que sólo unos meses antes tenía como saldo 1.219 euros. El resto del dinero se saldó con dos cheques cargados a otra cuenta de Alfonso Granados abierta dos años antes en una segunda entidad. Por ello, la Agencia Tributaria solicita información sobre los movimientos de ambos depósitos y, en concreto, de “las entradas y salidas de fondos [...]por importe superior a 5.000 euros”.
Compras sospechosas
Esta agencia recalca también que parte de todos estos fondos proceden supuestamente de la venta días antes del inmueble de la calle Aranda, cuya compra en 2011 fue la que despertó las sospechas de la UCO. Hacienda destaca que este piso fue tasado en 750.200 euros, pese a lo cual el valor que figura en la escritura de compra fue de 645.000 euros. Una importante diferencia que lleva a preguntarse a los autores del informe “cuál es el origen de los fondos para llevar a cabo esta compra inmobiliaria”.
Además, el documento destaca que el préstamo hipotecario de 200.000 euros utilizado para su compra fue amortizado en tan solo cuatro años por Alfonso Granados mediante “medios de pago” que “no aparecen acreditados”. Por ello, el informe de la Agencia Tributaria reclama nuevos datos al Consejo General del Notariado para saber si se ha notificado “algún incumplimiento” en esta compra y su financiación por parte del hermano del político “y si el principal del préstamo fue realmente aplicado a esta compra inmobiliaria o no”.
Finalmente, el documento analiza la compra de una tercera vivienda, esta situada en la calle Argensola de Madrid, cuya venta en 2011 por 400.000 euros sirvió supuestamente para adquirir la de Conde de Aranda. Sobre esta operación, Hacienda llama la atención en que existen dos escrituras notariales “por carta de pago y cancelación” de sendas hipotecas. De una de ellas, por un valor de 186.313 euros, el informe destaca que no existe información en la base de datos de la Agencia Tributaria. Un vacío documental que, según destacan los expertos de Hacienda, impide saber qué cantidad del dinero obtenido con la venta del piso se destinó realmente a la compra del siguiente inmueble.
Un dato más que, según Hacienda, refuerza las sospechas de que en la compra del piso de Conde de Aranda se usaron “fondos de terceros”, en referencia a los 360.000 euros que recogía la nota de Francisco Granados hallada en poder de Marjaliza
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No se admiten comentarios con datos personales como teléfonos, direcciones o publicidad encubierta